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jueves, 7 de junio de 2012

Parque natural Reserva del Saja

Parque Natural del Saja-Besaya El Parque natural del Saja-Besaya, situado en la Comunidad Autónoma de Cantabria, fue declarado Parque natural en 1988. Se encuentra enclavado en un área comprendida entre las cuencas hidrográficas del Saja y Besaya extendiéndose desde el Monte Río los Vados en el extremo norte, hasta los montes de Fuentes-Palombera y Sierra del Cordel (Campoo) en el límite sur. La extensión del parque natural comprende una superficie de 24.500 ha, de las cuales 23.932 corresponden a montes de utilidad pública. Todo el parque está integrado en la Reserva Nacional de Caza Saja. Hayas en el Monte Saja, Cantabria (España). El parque está compuesto por territorios pertenecientes a los términos municipales de: Arenas de Iguña, Cabuérniga, Cieza, Hermandad de Campoo de Suso, Ruente y Los Tojos, además de la totalidad de la extensión de la Mancomunidad Campoo-Cabuérniga.1 El único núcleo urbano asentado dentro del parque natural es el conjunto histórico de Bárcena Mayor, pueblo de antigüedad y soberbio ejemplo de la arquitectura montañesa. La geografía del Parque Natural Saja-Besaya se caracteriza por profundos valles que han ido excavando los abundantes ríos y arroyos tributarios del Saja y del Besaya. La diversidad de sus ecosistemas está determinada por el contraste altimétrico existente entre sus cotas mínimas, que rondan los 200 metros, y las cimas del Peña Iján, con 2.084 m, y Pico Cordel, con 2.061 metros de altitud. Comprende áreas de arbolado de gran interés (superficie forestal de 11.475 hectáreas), que alternan con brañas y laderas cubiertas de matorral. Destacan especialmente los robledales en las zonas bajas y septentrionales y los hayedos en las zonas altas (Saja y Bárcena Mayor) así como los acebales y los abedules y serbales del piso montano. La extensión del parque se clasifica en varias zonas de usos; de uso recreativo, forestal, de uso agropecuario, de reserva y de pastizal. En las zonas de aprovechamiento ganadero destacan los ejemplares de ganado tudanco, una peculiar raza de bovino autóctona, muy ligada a la tradición de la zona. Las zonas de reserva son áreas de especial protección, dentro del parque se han establecido dos zonas:2 Cureñas-Canal del infierno, 575 hectáreas. Monte Quemado, 195 hectáreas. El área protegida tiene una gran riqueza de fauna y flora. Entre las numerosas especies, destacan el jabalí, becada, nutria, lobo, águila real y corzo. El ciervo, que fue reintroducido en 1949, se encuentra en la actualidad en todo el territorio, atrayendo a miles de visitantes que esperan disfrutar con la berrea durante la época de celo. En la zona sur del parque es posible observar al oso pardo cantábrico.

martes, 5 de junio de 2012

Lagos de Covadonga


Lagos de Covadonga

 
El conjunto de los lagos de Covadonga (llamados Llagos de Cuadonga o Llagos d'Enol en asturiano) está formado por dos pequeños lagos, el Enol y el Ercina de origen glacial situados en la parte asturiana del Parque Nacional de los Picos de Europa, en el macizo occidental de dicha cadena montañosa. Existe un tercer lago, el Bricial, que sólo tiene agua durante el deshielo, pero también pertenece al conjunto.[1] En Asturias son conocidos, simplemente, como Los Lagos.
Se sitúan en el concejo de Cangas de Onís y se accede a ellos a través de una carretera de 14 km que nace en el Real Sitio de Covadonga para llegar en primer lugar al lago Enol. Su frecuente uso desde 1983 como final de etapa en la Vuelta ciclista a España ha popularizado internacionalmente el paraje.
La afluencia masiva de turistas, sobre todo aficionados al ciclismo, ha obligado a limitar el desarrollo de pruebas ciclistas en el entorno de Los Lagos. No obstante, la zona cuenta con una excelente infraestructura turística.
En las proximidades del lago Ercina, en Buferrera,[2] hasta 1979 se explotaron minas de hierro, manganeso y mercurio

Panteon Real de Covadonga

Los personajes reales que recibieron sepultura en Covadonga, según afirman diversos historiadores, fueron los siguientes:[1]
Tumba de don Pelayo, primer rey de Asturias. En la Santa Cueva de Covadonga.
  • Don Pelayo (¿?-737). Primer rey de Asturias e hijo del duque Favila.
  • Reina Gaudiosa. Esposa del anterior.
  • Una hermana del rey don Pelayo.
  • Alfonso I el Católico (693-757). Tercer rey de Asturias e hijo de Pedro de Cantabria, duque de Cantabria.
  • Reina Ermesinda. Esposa del anterior, hija del rey don Pelayo y de la reina Gaudiosa, y hermana del rey Favila de Asturias.

El rey don Pelayo falleció en Cangas de Onís, donde tenía su corte, en el año 737. Después de su defunción, su cadáver recibió sepultura en la iglesia de Santa Eulalia de Abamia, situada en la localidad asturiana de Abamia, en la que previamente había sido sepultada su esposa, la reina Gaudiosa. En el lado del Evangelio de dicha iglesia, se conserva en la actualidad el sepulcro, vacío, que contuvo los restos del rey, y enfrente, colocado en el lado de la Epístola, se encuentra el que contuvo los restos de su esposa. El cronista Ambrosio de Morales dejó constancia en su obra de que Alfonso X el Sabio, rey de Castilla y León, ordenó trasladar los restos del rey don Pelayo y los de su mujer a la Santa Cueva de Covadonga, aunque, no obstante lo anterior, numerosos historiadores han cuestionado la autenticidad del traslado de estos restos a Covadonga.[2]
En los sepulcros en los que se supone que yacen los restos del rey don Pelayo, y los de su yerno, Alfonso I el Católico, con sus respectivas esposas, se encuentran grabados, respectivamente, estos epitafios:[3]
"AQVI YACE EL SEÑOR REY DON PELAIO, ELLETO EL AÑO DE 716 QUE EN ESTA MILAGROSA CUEBA COMENZO LA RESTAVRACION DE ESPAÑA BENCIDOS LOS MOROS; FALLECIO AÑO 737 Y ACOMPAÑA SS M/gEr Y ErMANA"
"AQVI YAZE EL CATOLICO Y SANTO REI DON ALONSO EL PRIMERO I SV MVJER DOÑA ERMENISINDA ERMANA DE DON FAVILA A QVIEN SVCEDIO. GANO ESTE REY MVCHAS VITORIAS À LOS MOROS. FALLECIO EN CANGAS AÑO DE 757."

La Santina

Descripción e historia
El origen de la Cueva como lugar de culto es controvertido. La tradición afirma que don Pelayo, persiguiendo a un malhechor que se habría refugiado en esta gruta, se encuentra con un ermitaño que daba culto a la Virgen María. El ermitaño ruega a Pelayo que perdone al malhechor, puesto que se había acogido a la protección de la Virgen, y le dice que llegaría el día en que él también tendría necesidad de buscar amparo en la Cueva. Algunos historiadores dicen que lo más verosímil es que Pelayo y los cristianos, refugiados en la Cueva de los musulmanes, llevaran consigo alguna imagen de la Virgen y la dejaran allí después su victoria en la Batalla de Covadonga.
Las crónicas musulmanas sobre la Batalla de Covadonga dicen que en esta Cueva se refugiaron las fuerzas de Pelayo, alimentándose de la miel dejada por la abejas en las hendiduras de la roca. Las crónicas cristianas afirman que la intervención milagrosa de la Virgen María fue decisiva en la victoria, al repeler los ataques contra la Cueva.
La primera construcción en la Santa Cueva data de tiempos de Alfonso I, el Católico quien, para conmemorar la victoria de don Pelayo ante los Musulmanes, manda construir una capilla dedicada a la Virgen María, que daría origen a la advocación de la Virgen de Covadonga (conocida popularmente como la Santina). Además del altar a la Virgen se construyeron otros dos para San Juan Bautista y San Andrés. Alfonso I hace entrega de esta iglesia a los monjes benedictinos.
La Cueva estaba recubierta de madera, y en 1777 un incendio destruye la talla original de la Santina. La actual talla data del siglo XVI y fue donada al Santuario por la Catedral de Oviedo en 1778. La talla de la Virgen es de madera policromada, de dulces facciones, sostiene al Niño y una rosa de oro.
Durante la guerra civil la imagen de la Virgen desaparece, y es encontrada en la embajada de España en Francia en 1939. La capilla actual, de estilo neorrománico, es obra de Luis Menéndez-Pidal y Álvarez.